Marcas y el lenguaje inclusivo es la nueva receta del marketing digital en el siglo XXI. Aunque los avances en este aspecto son muy lentos, no hay duda de que se está despertando una nueva consciencia en cuanto al uso del lenguaje y cómo se puede utilizar de forma más paritaria.
El lenguaje inclusivo va mucho más allá de una moda. Se trata de una forma de reivindicar la igualdad entre hombres y mujeres, pero también reclamar igualdad y visibilización para otros colectivos. No se puede ser ajeno al hecho de que «lo que no se menciona, no existe». Por ello, muchas marcas se han decidido por incorporar fórmulas inclusivas en sus estrategias de comunicación que les permitan alcanzar a sus audiencias de forma efectiva.
El lenguaje inclusivo no está libre de controversias. Solo hay que dar un pequeño paseo por Twitter para ver que el debate está bastante encendido. Además, la RAE se niega a incorporar el lenguaje inclusivo en las reglas gramaticales, por lo que muchos usuarios se posicionan en contra.
Sin embargo, un idioma es un ente vivo y, por ello, está es constante transformación. Además no es una cuestión baladí. El lenguaje configura a la sociedad, porque lo que se dice es el reflejo de lo que se piensa y de cómo se construyen las ideas. A su vez, expresar ideas de una u otra manera también refuerza la manera de pensar.
Las personas tienen el poder de cambiar el lenguaje y, como admite Santiago Muñoz Machado, director de la RAE, al final si la gente se empeña en utilizar el lenguaje inclusivo, tarde o temprano habrá que incluirlo en el diccionario.
Hay muchas fórmulas en las que las marcas y el lenguaje inclusivo se combinan. Estas puede ser por género, por etnia o, incluso, por la condición social de las personas. Sea cual sea el tipo, el objetivo es que nadie se sienta excluido y se de visibilidad a distintos colectivos que hasta ahora no se nombraban.
Una de las primeras fórmulas en el binomio marcas y lenguaje inclusivo es el uso de la @ o la «x» para incluir tanto al femenino como al masculino. Hay que recordar que en el castellano, todo lleva el masculino genérico y, por ello, se empezó a emplear estos símbolos para incluir a ambos.
De esta manera, se sustituye la vocal que marca el género en las palabras. Por ejemplo, ciudadan@s, usuarixs, algun@s. Aunque el uso de la @ o la «x» tiene sus inconvenientes, y es que estas palabras solo sirven en el lenguaje escrito, puesto que no se pueden pronunciar.
Otra opción es construir frases en las que se incluyan ambos géneros, bien utilizando la barra oblicua: usuarios/as, o mencionando por completo a ambos géneros: usuarios y usuarias. Estas suelen ser las fórmulas más habituales entre las marcas y el lenguaje inclusivo. Aunque tienen varios inconvenientes:
Si hay una forma de incorporar el lenguaje inclusivo sencilla, pronunciable y que englobe absolutamente a todos los géneros es el uso de la «e» para sustituir el masculino y el femenino:
Por ejemplo: alumnes, todes, nosotres…
El castellano tiene la característica de asignar un género a prácticamente todas las frases. Aun así, es uno de los idiomas más ricos del mundo y siempre hay alternativas para las marcas y el lenguaje inclusivo. Por ejemplo, utilizar términos sin género que hablen de colectivos.
De esta manera, las empresas pueden respetar a rajatabla las normas del lenguaje, pero mostrarse más responsables frente a los colectivos más vulnerables. Simplemente es cuestión de darle la vuelta a muchas frases:
Hoy en día los usuarios esperan un mayor compromiso social por parte de las marcas. Se ha abierto un nuevo paradigma y las marcas deben aprender a adaptarse a los nuevos códigos de las audiencias si desean conseguir despertar emoción y empatía. Pero, además, las marcas y el lenguaje inclusivo pueden obtener buenos resultados:
Las marcas han decidido dejar de ser pasivas en cuanto al lenguaje inclusivo y han empezado a mostrar sus valores, su filosofía y su compromiso con el progreso social. Estas 5 marcas se arriesgan e incorporan fórmulas inclusivas en sus estrategias de comunicación y redes sociales.
La marca de automóviles Cintroën se ha subido al carro del lenguaje inclusivo y ha comenzado a adaptar sus mensajes a un público cada vez más concienciado. En este caso, con motivo del día internacional contra el cáncer de mama, quiso hacer un homenaje a las mujeres, pero aprovechó la ocasión para no dejar a nadie atrás incluyendo la expresión «todxs».
Aunque el hábitat natural del tándem entre marcas y el lenguaje inclusivo son las redes sociales, hay marcas que deciden ir más allá e incorporarlas en otro tipo de comunicaciones. Este ejemplo se trata de un texto informativo en la web de Asos escrito completamente con lenguaje inclusivo.
No hay que olvidar que esta marca es una de las pioneras en inclusión y diversidad. De hecho, hace años dejaron de retocar las fotos de las modelos para mostrar los cuerpos «al natural», lo que les ha valido un gran apoyo por parte de los consumidores.
Fox aprovechó el estreno de la serie «Pose» para ofrecer al público un contenido útil y de gran valor añadido: explicar en qué consiste el lenguaje inclusivo para que los usuarios que viesen la serie pudieran entender el lenguaje que se utiliza en ella.
Zity es una empresa de alquiler de vehículos por horas que opera en Madrid. Como puede verse en el ejemplo, también utiliza el lenguaje inclusivo en sus publicaciones en las redes sociales. En este caso, aprovecha el día mundial del teatro para hacer un guiño a Shakespeare y dar una muestra de apoyo a la nueva corriente lingüística.
No solo las marcas convencionales utilizan el lenguaje inclusivo. Con el paso del tiempo se ha podido observar que los cuerpos de policía también incluyen estas estructuras en las publicaciones que comparten en sus perfiles sociales. En esta publicación solo han querido desear un feliz viernes y recordar a los usuari@s la importancia de respetar las normas viales.
Pompeii surgió hace unos años como una marca dirigida a los millenials y su crecimiento se desarrolló en el entorno de las redes sociales. Dando un golpe de tuerca a su esencia eminentemente nativa, recientemente han lanzado una campaña de cartelería en Barcelona y Madrid con el objetivo no solo de romper los estereotipos, sino de reírse de ellos. Bajo el nombre de «Radicalmente honesta», la campaña realizada conjuntamente con PutosModernos dedica un cartel al uso del lenguaje inclusivo que invita a la reflexión.
Cada vez más, las marcas deben sumarse a los retos que les plantean sus audiencias y el uso del lenguaje inclusivo en la comunicación es uno de ellos. En Rebold te ayudamos a realizar campañas efectivas de marketing y comunicación para que puedas conectar y despertar emociones en tu público objetivo. ¿Hablamos?
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