En Rebold tenemos la certeza de que las empresas deben catalizar comportamientos positivos a través de su actividad. Por este motivo hemos querido dedicar este artículo a la transformación que está experimentando la industria de la moda, la segunda más contaminante del mundo.
En los últimos años ha tomado fuerza el término “moda sostenible” como uno de los pilares fundamentales para frenar el cambio climático. Pensar en moda sostenible es incidir en todas las etapas del ciclo de vida de las prendas. Desde el patronaje (patronaje zero waste), pasando por su producción (qué cantidad de agua emplean, si se usan o no productos químicos y se vierten a la tierra y agua), el transporte (cantidad de CO2 que expulsa al medioambiente), logística en las tiendas (embalajes internos y externos, electricidad, etc), cómo el consumidor cuida la prenda, la lava, plancha o no y por último, su final de vida que, en los mejores casos, se biodegrada en la tierra, además de ser compost nutritivo para la misma.
Un gran aliado para las empresas que están en transformación es la creación de contenidos, ya que la gran ventaja que tiene el mundo digital es que ofrece “la posibilidad de acceder a la información de forma inmediata para profundizar sobre los temas ligados a la efectividad de las propuestas en materia de sostenibilidad”, tal y como nos afirmó Nadège Seguin, coordinadora del movimiento Fashion Revolution España. Además, Seguin destacó el papel fundamental que tienen las redes sociales para “transmitir material educativo a gran escala”.
Coincidiendo con sus palabras, desde Rebold queremos recomendar 5 perfiles de Instagram que nos han parecido interesantes y de los que podemos seguir aprendiendo:
1. Compra localmente. Además de favorecer a las pymes y aportar riqueza en el país, estás contribuyendo a favorecer al medioambiente, pues se ahorran grandes cantidades de contaminación de CO2 debido al transporte.
2. Fíjate que el embalaje sea de materiales reciclables y sostenibles.
3. Lee las etiquetas y elige materiales sostenibles.
4. Pide ticket electrónico siempre que sea posible.
5. Compra de segunda mano o da una larga vida a tus prendas, customizándolas o reparándolas. También puedes llevar tu ropa usada a tiendas que tienen cestas para depositarla o donarla.
Esperamos que os hayan servido de ayuda y os recordamos: “pequeñas acciones traerán grandes cambios”.
Rosalía Martínez, Content Intern Rebold
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