Para conocer las preocupaciones de los consumidores sobre la crisis de Ucrania, la compañía GWI ha publicado recientemente un estudio que recopila preocupaciones, actitudes y reacciones sobre el conflicto. Ha extendido su trabajo a 21 países de todo el mundo.
Los datos de la encuesta, realizada a personas de entre 16 y 64 años, arrojan luz sobre cómo se siente la ciudadanía global, los tipos de respuestas que quieren ver de las instituciones y cómo la guerra está afectando a sus vidas y a su economía personal.
Las preocupaciones de los consumidores sobre la crisis de Ucrania demuestran que no es un problema local. Las mayores preocupaciones a nivel global son una posible escalada del conflicto a nivel mundial, el uso de armamento nuclear y la conquista de otros territorios.
Hay que destacar la rapidez con la que se ha desarrollado la preocupación nuclear. En noviembre de 2021, solo el 10% de los consumidores encuestados en 9 países estaban realmente preocupados por las armas nucleares. En una lista de 13 factores de riesgo lo colocaron al final.
Actualmente, Italia, España y Rumania muestran los niveles más altos de preocupación por el futuro de su propio país.
Los países más preocupados no son necesariamente los que más cerca están de Ucrania. De los 5 países más preocupados por la escalada del conflicto, ninguno está en Europa.
El factor edad juega un papel importante en este apartado. Gran parte de los usuarios de Internet son jóvenes, los cuales reciben y visualizan constantemente noticias sobre el conflicto. Los consumidores más jóvenes están más preocupados por lo que podría depararles el futuro.
La preocupación por las armas nucleares es más pronunciada entre los jóvenes y, por extensión, entre los países con poblaciones con altos índices de jóvenes usuarios online. Que el país tenga armamento nuclear o no tampoco influye.
El 32 % de las personas de entre 16 y 24 años cree que es probable que se utilicen armas nucleares en el futuro, en comparación con el 22 % de las personas de entre 55 y 64 años. Aunque cabe destacar que la preocupación por el uso de armas nucleares es menor que la preocupación general por una escalada del conflicto a nivel global.
Alrededor de 6 de cada 10 están de acuerdo en que la población rusa no debe ser castigada por el conflicto. Asimismo, aproximadamente 2 de cada 5 personas piensan que los países deberían defender Ucrania enviando sus propias tropas. Este sentimiento es más intenso en varios países geográficamente más cercanos a este país.
El rango de edad 25-34 años es el que más duro se muestra ante la desinformación de algunos medios de comunicación. En cambio, los de 16-24 no se ven capaces de identificar las fake news que salen sobre la guerra.
Los consumidores están preocupados por los factores políticos, pero el costo económico diario es una preocupación inmediata mayor que las amenazas a la democracia o a las instituciones políticas. Es posible que muchas personas reduzcan su gasto, si no lo han hecho
ya.
Las preocupaciones por el petróleo y el gas son mayores en los países europeos que en estos momentos sufren la falta de suministro, sobre todo en Francia, Italia y España.
A día de hoy, poco más de 1 de cada 5 dice que el conflicto les ha reducido la atención por el covid-19, Este hecho demuestra que la guerra ha reemplazado a la pandemia como el gran problema en la mente de muchas personas.
De las preocupaciones de los consumidores sobre la crisis de Ucrania, la inversión diaria (compra, gasolina, luz, etc.) es la más destacada.
En esta situación se muestran dos interpretaciones interesantes. Por un lado, los consumidores se muestran muy inquietos por su situación personal, ya que el 16% dice que el costo de vida es su mayor preocupación. Pero el 7 % se decanta por el futuro de Europa y las amenazas a la democracia como máximo temor, lo que demuestra que algunas personas están motivadas por cuestiones políticas más abstractas.
Aunque las preocupaciones sobre la escalada y el ataque nuclear son altas, esta es fundamentalmente una crisis que tiene a los consumidores mirando su economía personal por encima de todo. Sus inquietudes más directas son los posibles daños a la economía de su país, el suministro de energía y sus propias finanzas.
Es probable que los consumidores más jóvenes de Sudáfrica, Turquía y Rumania se sientan más preocupados por el impacto en su bienestar mental que en su bolsillo.
Las principales preocupaciones de los consumidores sobre la crisis de Ucrania giran en torno a la economía personal, los suministros de gas y el coste de la vida. En Reino Unido y en la India, por ejemplo, la amenaza nuclear también inquieta a muchas personas.
En nuestro país, en la primera posición se encuentran los gastos de la casa y el precio de la vida. En segundo lugar se sitúa el impacto del conflicto en la economía del país. Por último, el tercer aspecto importante a destacar es el suministro de gas y petróleo.
Desde Rebold podemos ayudarte a conocer la evolución del consumidor y conectar con él en función del mercado. Nuestro equipo de expertos te ayudará a adaptar y optimizar tus acciones de comunicación en un entorno cambiante.
En la actualidad, el marketing ha evolucionado de manera significativa, adaptándose a las nuevas tendencias…
En los últimos años, utilizar imágenes es una de las maneras más efectivas de comunicar…
En la actualidad, resulta indispensable medir la efectividad de las campañas publicitarias. Las UTMs de…
El propósito principal de toda empresa es lograr que su público objetivo adquiera sus productos…
En la era digital, el Big Data en marketing se ha convertido en una herramienta…
La Cadena de Valor de Porter es un concepto fundamental en la gestión empresarial y…