La sostenibilidad y el compromiso con el entorno cada vez tienen más peso en el contexto global actual y han dado pie a conceptos como Responsabilidad Social Corporativa (RSC) y Marketing Social Corporativo (MSC). Pero, entre RSC Vs MSC, ¿cuál es más relevante?
La sociedad moderna cada vez es más consciente del daño que generan las conductas humanas al medio ambiente y al equilibrio de las mismas sociedades. Es por eso que es imprescindible tomar acciones que fomenten el consumo responsable y guarden relación con los derechos básicos de los seres humanos.
Dentro de estas dos principios hay un amplio espectro de ideas a las que cada negocio se puede adecuar, ya sea por obligación, conciencia o por publicidad.
Este concepto engloba acciones que buscan que la empresa tome un papel protagonista dentro de su contexto y contribuya a mejorarlo. La idea es que, según su propio esquema de valores, realice esfuerzos para mejore su conducta respecto a determinados aspectos.
Ahora bien, estas acciones pueden ser voluntarias y reflejar los valores, misión y visión empresarial o responder a normativas existentes en el lugar donde opera. Es decir, muchas países obligan a empresas a realizar actos para mejorar la sociedad. De esta forma pueden, incluso, evadir impuestos.
De este modo, una empresa responsable debe cumplir con el marco legal vigente en su entorno haciendo actividades que mejoren su valor social.
Aunque ambos conceptos parezcan lo mismo, el MSC tiene particularidades que lo desmarcan. Lo que se hace aquí es tomar las acciones de la RSC para enmarcarlos dentro de un sistema de promoción de la marca. Es decir, se hace marketing con la responsabilidad social.
En este caso el enfoque es conseguir una ventaja competitiva mejorando el bienestar de sus consumidores. Además, el Marketing Social Corporativo también vincula a la audiencia con las acciones, por lo que no solo la marca hace cosas buenas, sus clientes también.
La verdad es que van de la mano. No tiene sentido establecerlas como polos opuestos porque la verdad son complementarias. En la medida en que la empresa genera acciones socialmente responsables también las da a conocer como una forma de construir la personalidad de su marca.
Lo cierto es que realmente no existe una confrontación RSC Vs MSC, ambos son favorables y deben vincularse de tal forma que el beneficio empresarial sea casi idéntico al beneficio social. No se trata de ventas directas, sino de cómo te muestras en el contexto en el que te desarrollas profesionalmente.
Los buenos siempre deben ser más, y de esto se trata un poco la RSC. Al final del día la empresa tiene que ser un buen ciudadano y debe ser vista como tal. Esto se logra buscando el equilibrio entre tus propósitos comerciales y cómo beneficias a la sociedad.
En resumidas cuentas, la responsabilidad social es una suerte de conducta altruista, no es directamente una forma de hacer publicidad, ni está hecha para mejorar la imagen de marca. Es precisamente al contrario, una forma de gestión colaborativa que, al final, traerá beneficios como el posicionamiento de marca.
De esta forma es importante destacar que cuando se lleva a cambo la comparativa RSC Vs MSC, ambas deben ser conductas transparentes que generan acciones verdaderamente comprometidas. No es una forma de venderte, es una responsabilidad completa y honesta.
La RSC engloba también acciones de marketing, por eso es importante conocer aquello que la caracteriza para ejecutarla de forma tal que beneficie también al Marketing Social Corporativo:
Si tu gestión social cumple con estos requerimientos, entonces puede, y debe, vincularse con el Marketing Social Corporativo.
Al final lo que se busca es que las empresas tomen un papel como agentes que lideran el cambio para mejorar la vida a nivel local, nacional y global. Estas iniciativas permiten que tengan más posibilidades de expandirse exitosamente, ya que son bien recibidas y percibidas en su entorno.
Además, para las sociedades de hoy los valores son un aspecto más relevante. Muchas personas aspiran a trabajar en compañías cuyos valores coincidan con los suyos.
La otra cara está en los consumidores. Estos esperan tener relación con aquellas empresas que se muestran más conscientes del contexto en el que están. De esta forma, ellos mismos pueden mejorar el impacto o huella negativa que dejan a la sociedad.
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